top of page

Destripando Estereotipos: y me dijeron Gorda


Cuadro de Carlos Santana

Recuerdo claramente la primera vez que me sentí "gorda".

Tenía 10 años, por cumplir los 11. Lo recuerdo claramente porque pegué un estirón y la falda de colegio me ajustaba y me quedaba corta; me apretaba las caderas y por eso una muchacha del mismo grado que el mío pero un año mayor (o dos), me dijo: "negra gorda", al pasar por mi lado a la hora del recreo.

No le presté atención, era algo muy surreal para una niña. Que ya era puber pero aún no lo notaba.

A partir de eso comencé a ser mas consciente de los cambios en mi cuerpo. Al año siguiente empecé la secundaria y absolutamente todo fue diferente.

La sociedad, los medios, el capitalismo que básicamente crea necesidades, nichos de mercado y que sabe explotar muy bien a la población subyugada; no desperdicia para nada el sometimiento de nuestros cuerpos y mentes ansiosos por alcanzar ideales y estereotipos que en su mayoría son inalcanzables.

Los vellos, los granos, la menstruación, los olores femeninos, la tersura de nuestra piel, la firmeza de nuestras tetas y nalgas, la cantidad y volumen de nuestro cabello, el color de nuestros ojos y piel; etc.

Todo es motivo de descontento; nos venden una imagen y una realidad para tooooodas nosotras; lo cual del por si es bastante ilógico; ello no quita que no funcione.

He pasado (aún sucede) mucho tiempo de mi vida deseando otras formas, quitando aquí y allá lo que es fácil y tratando de usar artificios para llenar los vacíos. Por suerte golpe tras golpe también me alimenté de conocimientos, y he llegado a un punto de mi vida en el que si bien no estoy libre de estereotipos e ideales, puedo cuestionarlos y encontrar felicidad y plenitud en mis circunstancias, mi realidad y mi crecimiento contínuo.

Ahora, una adolescente (aún recuerdo como se siente) está preocupada por encajar. Ser aceptada entonces implica cambiar o hacer lo necesario para entrar en el molde.

Hay miles de productos pensados únicamente para las mujeres, maquillaje, perfumería, tintes para el cabello... Qué se yo, personalmente no me parece tan ofensivo lo que se usa para expresar tu "identidad sexual", pero por ejemplo, cremas aclaradoras de piel, bronceadores, productos para depilación, siliconas, prótesis en general, procedimientos modificadores del cuerpo, jabones especiales o desodorantes para la zona íntima, etc etc.

No estoy demonizando a los productos en si ni a las mujeres que recurren a ellos. Mi crítica está enfocada al sistema que nos mete en la cabeza la imperfección, que convierte en horrendas las estrias, celulitis, vello corporal, michelines, tetas pequeñas, nariz curva, lunares, etc.

Esto es alarmante porque hay mujeres que sienten asco de ellas mismas, que vomitan el almuerzo por temor a engordar, que se someten a dolorosos procedimientos para eliminar vellos, lunares y demás rasgos que según la sociedad no son "bonitos". El sistema ha corrompido y hecho suyo el concepto de belleza, cuando es algo individual y subjetivamente complejo. El capitalismo ha creado un ideal irreal y explota la inseguridad que despierta en muchas mujeres, creando productos que en apariencia te ayudarán a alcanzar ese molde tan incómodo y opresor.

Hay mujeres que sienten asco de su menstruación, que lo consideran algo sucio, como si se tratara de un banal proceso de excreción. ¡Eso no debe seguir pasando!

Somos únicas, llenas de peculiaridades que nos hacen distintivas, hay que encontrar belleza en nosotras mismas, y eso prende una llama que proyecta y alcanza a todos a nuestro alrededor... Busca la chispa, en tu sonrisa, en tu mirada, en tu cabello, en las formas generosas de tu cuerpo, en la angulosidad de tus caderas, en la claridad de tus ideas y la cantidad de amor que estas dispuesta a profesarte, cuidándote así como eres, sin artificios ni moldes en los que encajar.

Enseñemos a lxs niñxs que en la diversidad está la belleza, que ningun ser humano puede definirse por como se ve, que no hay que decir "gorda", o "negra"; porque nunca sabes el golpe que le darás a alguien y que le costará años sacarse de encima.

Artículo original publicado en el FB de Kem @trincherafeminista

bottom of page